Entrevista a Francisco José Rosales Martín | Componente de la Agrupación Musical Cristo de Gracia
Actualmente hay una gran cantidad de personas que comparten su día a día con la Agrupación Musical. Por esta razón, nos gustaría seguir compartiendo con vosotros otra de las entrevistas a una de estas personas y así poder hacer más entretenido el #quédateencasa con CDG.
Hoy es el turno de Francisco José Rosales, componente de la Agrupación Musical, Hermano del Cristo de Gracia y responsable de los traslados de la Agrupación.
- ¿Cuántos años llevas en la Agrupación Musical? ¿Por qué decidiste entrar?
Llevo en la Agrupación Musical nueve años. La decisión de entrar a formar parte de la misma fue un poco de casualidad, aunque siempre, desde que era pequeño, tenía claro mi afán por tocar la corneta o el tambor. Y fue aquel mes de junio de 2011 cuando llegó el momento, un día que nunca olvidaré.
- Actualmente, tras tantos años en la Agrupación, ¿cómo podrías definir su crecimiento musical y personal?
Siempre los crecimientos en este mundo son bastantes lentos, pero si cabe destacar que cada año trabajamos muy duro para dar un pasito más, sobre todo y lo más importante, trabajando en un estilo y un sello que tiene la Agrupación Musical, el cual es muy definido y característico. Pero pese a todo, la evolución es buena y, bajo mi punto de vista, va por muy buen camino.
- Una de tus mejores amistades se formó entre las filas de esta Agrupación, ¿qué te ha aportado, además de esto, en lo personal? ¿Qué crees que te puede seguir aportando? ¿Consideras que formar parte de una banda te da mucho más que meramente crecer a nivel musical?
Dentro de una banda se pasan muchas horas al cabo de un año, esto va formando amistades especiales de las cuales, por supuesto, aprendes mucho y no sólo en lo musical. Como se menciona en la pregunta, se llegan a forjar buenas amistades, las cuales también te conducen en el aspecto personal, fuera de la banda, donde gracias a esa confianza hemos sabido aportarnos mucho el uno al otro, siempre nos intentamos ayudar, o al menos ver el punto de vista u opinión para poder complementarnos.
A parte de lo musical, uno por su puesto aprende valores generales de la vida, como es el respeto o el compañerismo, los cuales siempre y desde un primer momento, se han defendido desde dentro de la Agrupación. Por eso muchas veces se dice que en una banda no solo te enseñan a tocar un instrumento, sino que también te enseñan a ser y crecer como persona.
- Para una buena organización de la Agrupación, hay que coordinar a muchas personas. Por ello, existen diversos “cargos”, entre ellos, el de la movilidad de la banda, de la que tú eres responsable. ¿Podrías explicar en qué consiste tu labor como encargado de los autobuses?
A priori, parece una tarea fácil, pero esta labor es muy importante y compleja al tener que estar pendiente de mucha gente.
Mi labor empieza desde que se conoce que la banda va a asistir a cualquier acto fuera de la Capital. A partir de ahí, siempre hay unos pasos a seguir como por ejemplo: solicitar presupuesto a la empresa de transportes; saber horarios y calcularlos para que la banda llegue a su debida hora; organizar a todas las personas ya que algunos van en coche, gente que a lo mejor por trabajo no puede asistir, etc…; coordinar para que todo el viaje vaya bien y lleguemos al sitio exacto del destino. No es hasta que ya regresamos a nuestra nave de ensayo y cada uno vuelve a su casa, cuando ya respiro y sé que todo ha salido bien.
- Has podido vivir miles de momentos en la Agrupación, ¿con cuál te quedarías?
Podría elegir entre muchos, pero sin duda, cada concierto a los pies de nuestro Stmo. Cristo de Gracia, o cada Jueves Santo, a puerta cerrada, justo antes de realizar la Estación de Penitencia. Son momentos mágicos, imposibles de describir con palabras.
- Formas parte de la cornetería de la Agrupación, ¿has pensado alguna vez en cambiar de instrumento?
Pese a que haya instrumentos como el bombardino o el tambor que me gustan mucho, a día de hoy no se me ha pasado por la cabeza hacer ese cambio.
- ¿Da un poco de “miedo” el saber que tienes que interpretar un solo y que hay un gran número de personas mirándote?
Si bueno, es una situación un poco rara o extraña. Eres consciente de que tienes mucha gente observándote y aunque tú quieres intentar mantener la calma para que salga bien, porque es una situación que te crea mucha presión, los nervios siempre están ahí. Pero al final, es algo a lo que medio te acostumbras, o aprendes a sobrellevar.
- ¿Cómo visionas el próximo año de la Agrupación tras el mazazo de la suspensión de actos y salidas procesionales de este 2020?
Están siendo momentos duros y difíciles para todos, la verdad que incluso hay veces que no me termino de hacer a la idea que este año no vamos a poder poner nuestros sones detrás de nuestras queridas Hermandades. Pese a todo, estoy seguro de que pronto podremos volver a nuestra actividad normal y que esa vuelta será más fuerte y con más ganas que nunca.
Veo un nuevo año muy ilusionante, aunque por supuesto nos tocará seguir trabajando duro para seguir creciendo poquito a poco. Tendremos que ponernos nuevas metas, nuevas ilusiones y nuevos objetivos, además de buscar motivaciones para que tras este palo tan duro como ha sido la suspensión de las salidas procesionales en nuestra Semana Santa 2020, se haga un poquito más corta la larga espera hasta esa nueva Semana Santa 2021.
- ¿Cuál fue el procedimiento a seguir tras saber de dicha suspensión? Teniendo en cuenta de que ya estaba cerrada, prácticamente, toda la organización de viajes, ensayos, conciertos….
Pues fue, por supuesto, algo muy duro de asimilar después de un año de trabajo. En estos meses previos, además, hay muchos preparativos y mucha organización para que todo salga genial. Pese a esto, sabemos entender y somos conscientes de que, en la situación en la que estábamos, el suspenderlo todo era la única opción viable.
Principalmente, todo comenzó con la suspensión de uno de nuestros conciertos, donde comencé a ponerme en contacto con la empresa de transportes para anular los desplazamientos previstos. Tras esto, vino todo de seguido, ya que llegó la noticia de la suspensión total de los actos de Cuaresma y de las salidas procesionales, por lo que mi labor se terminó al suspender toda organización prevista para las semanas siguientes siguiendo el mismo procedimiento.
- Para finalizar, ¿podrías describir qué significa para ti ser de la Agrupación Musical del Cristo de Gracia?
Formar parte de la Agrupación Musical Stmo. Cristo de Gracia significa creer en la Gracia de Dios, ser un privilegiado y un afortunado por poder acompañarlo cada Jueves Santo y, sobre todo, dejarse acoger en el cobijo que te dan sus inmensos brazos. Desde aquel, mi primer Jueves Santo, cuando estábamos dentro del cocherón de salida, sin más explicación, supe que no me había equivocado. Y como siempre he dicho, no todo el mundo puede ser elegido para pertenecer a esta Agrupación Musical.
Entrevista realizada por:
Esther Cayuelas González
Componente de la Agrupación Musical